Weiner utiliza el lenguaje como material principal de su obra. Los textos los realiza siempre con letras en mayúsculas, ya que como él ha explicado de esta forma se anulan las jerarquías ente las grafías y así las palabras forman un conjunto. Sus textos se han reproducido en varias superficies por todo el mundo desde la década de los años sesenta. Su obra se lee, no sólo se ve, dado que su existencia depende de la lectura del espectador independientemente del espacio físico al que esté destinado.

En 1968, Weiner redactó e hizo pública su declaración de intenciones que a la fecha rige su trabajo:

1. El artista puede construir la obra.
2. La obra puede ser fabricada.
3. La obra no tiene por qué ser construida.

Cada una de estas directrices es igual de válida y coherente con sus planteamientos, siendo el receptor quien decide la condición de la obra en el momento de recibirla.

La Colección Jumex cuenta con varias piezas de Weiner, una de ellas está sobre un muro que puedes observar y leer desde la cafetería del Museo Jumex.