Las pinturas de Ana Segovia contienen rostros y cuerpos indefinidos en entornos cinematográficos que ilustran cómo el montaje, el artificio y la performatividad están involucrados en la creación de identidades nacionales y de género. Sus obras más recientes se muestran de tal forma que fusionan instalación, teatro, danza y videoarte. En I’ve been meaning to tell you [He querido decirte], Segovia reevalúa las representaciones de la hipermasculinidad dentro del cine convencional. Para esta obra se inspira en películas de baile icónicas de los años ochenta, como Footloose [Footloose: Todos a bailar] y Dirty Dancing [Baile caliente], para crear un conjunto de fotogramas de películas imaginarias donde los protagonistas queer actúan en clubes nocturnos. Empleando la alegría como protesta en contra de las normas tradicionales, las obras abordan las brechas culturales, las historias no contadas, y subvierten las narrativas heteronormativas presentes en la cultura popular.